jueves, 20 de septiembre de 2007

Un dia en la vida de Freud...

Bueno, como hoy ya es jueves, hace mucho que no subo nada, y dudo que mañana viernes lo haga, voy a dejarles un trabajo que hice para la facu unas semanas atras, que no es graaaaaaaaan cosa pero esta simpatico. Además, mejor esto antes que nada!

Un día en la vida de Freud (la verdadera historia):

Ni bien se levantaba, a tempranas horas de la mañana, el Sr. Freud no tomaba ningún tipo de desayuno convencional. Ni café, ni té, ni tostaditas con mermelada, ni nada de esas boludeces a las que nosotros estamos acostumbrados.
Su desayuno consistía en el consumo de algún tipo de sustancia alucinojena que le permitiera soportar las frustrantes horas posteriores de sesión, y a la vez, que le permitiera generar respuestas incoherentes a sus pacientes, para que estos se sintieran resguardados y consolados.
Luego de esto, se arreglaba un poco. Es decir, un pequeño "baño". Pero él no acostumbraba a hacer el baño que nosotros pensamos, sino que hacia el simple "bolas, culo y sobaco", por medio de una delicada y fugáz enjuagadita.
Una vez realizado este procedimiento rutinario, partía hacia su consultorio. De acuerdo a la consistencia de su desayuno, a veces iba levitando y otras volando.
Al llegar, y debido al cansancio del "vuelo", encendía un pequeño porrito para poder mantenerse a una altura estable el resto del día. Y ahí si, comenzaba a hacer ingresar a sus pacientes de a uno.
Como le interesaba muy poco lo que ellos le decían, se había comprado un sillon muy comodo, el cual tenía un apoyabrazos amplio que le servía para apoyar su whisky.
Las sesiones le parecían eternas, pero le generaban una buena fuente de ingresos, ya que el psicoanalisis se había puesto de moda en esa epoca y era un boom!
Eran las 7 de la tarde, y comenzaba a oscurecer por las calles de la ciudad. Freud estaba listo para salir de su consultorio, todavía algo drogado, borracho por el whisky y completamente trastornado por todas las cosas que tenía que oír durante el día. Así que ya alejado de la realidad, pero conciente, se dirigía a cometer su serie de asesinatos diarios, que eran su unica forma de saciar esa alteración del momento.
Durante los años siguientes, casi sin darse cuenta, se había convertido en el asesino en serie más temido y buscado de toda Austria, luego de toda Europa, y la policia era incapaz de dar con su identidad.
Freud, un poco más tranquilo ahora, se encontraba en condiciones de dirigirse hacia el burdel que asistía diariamente, en el cual, no hacía cola en la puerta (safando de que no lo dejen entrar por capacidad llena o por discriminación) y en donde tenía reservado el VIP.
Luego de enfiestarse en pequeñas orgias (en las cual él decía: "si son mujer mejor"), se dedicaba a tomar lo más que podía, intercalando con alguna que otra droga.
Cuando sentia que se había desahogado por completo de todo su trágico día, estaba en condiciones de retirarse a su casa, siempre con ayuda de la seguridad del burdel que lo sacaban afuera y luego de la asistencia medica (tenía OSDE 210), que lo arrimaban hasta la puerta de su casa. En ese instante perdía el conocimiento y no recordaba nada hasta el otro día, que empezaba todo de nuevo.

FIN...

Espero que les guste...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Si, si, aca estoy yo otra vez, el anónimo, el incapaz de darse a conocer por miedo a quedar como un rotundo boludo por un comentario desafortunado.
Muy buena la idea y la historia, aunque tal vez un poco rapidita y confusa por momentos, pero igual muchas gracias por copartirla con nosotros los consumidores de internet.

Anónimo dijo...

bueno de una vez por todas entre en este mundo del blog, espero aportar desde cerebro y alma hacia los suyos.
ya que entré en este comentario debido a que fue la única manera en que descubrí escribir aca, voy a dejar mi opiñión:
me gusto la idea de recrear una historia de vida acerca de un personaje conocido, uno muchas veces no sabe como fue realmente la vida "posta" de grandes hombres mas alla de lo que escribieron y sus pensamientos que si bien pueden decir mucho de uno también pueden decir nada, y entonces imaginarle una vida al personaje nos puede poner a todos a una altura igual en donde nos damos cuenta de que todos en un punto (y hasta muchos) somos iguales mas alla de los dones que algunos reciben en vida.
Nos da otra perspectiva de la persona mas alla de si la historia es real o no.
aparte de la historia en sí que nos diste, me gusto la idea.
una vez leí un libro con la misma idea sobre la vida de Hitler, esta muy bueno de verdad (aclaro que no comparto las ideas nazis por las dudas de cualquier malentendido). lo colgaría en tu blog ya que es muy corto, pero lo tengo en ingles y tendría que escribirlo en un archivo salvo que lo encuentre en la net en fin nose, despues vemos.

¿sabian que se dice por ahi que Karl Marx era un hombre que frecuentaba mucho "bares" y solia emborracharse muy seguido? (lo dejo a tu criterio)

bueno nada era comentar algo nomas
te mando un beso sirito y felicitaciones por tu espacio virtual adquirido como tambien un saludo a los demas